Beneficio de los Juegos Infantiles en Niños con Autismo
Hacer de los Juegos Infantiles un lugar adecuado para niños con necesidades específicas, como los niños con autismo, representa una gran responsabilidad para los diseñadores de Espacios Recreativos. La diversidad que cada niño personifica nos obliga a mirar hacia otros horizontes y mantenernos constante e insistentemente en vanguardia. Añadir características definidas, como crear áreas propicias para la autorregulación, u optar por la integración de Juegos con modificaciones importantes, como los columpios de tela, brindarán una experiencia satisfactoria a todos los chicos que deseen hacer uso de ellos, e indudablemente a sus cuidadores.
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¿Cuáles son los beneficios a nivel físico y cognitivo que proporcionan los Juegos Infantiles en los niños con autismo?
A niveles físico y cognitivo, son numerosos los beneficios obtenidos por los niños que van al parque a realizar una actividad física en los Juegos Infantiles, porque:
¿Qué tipo de estímulos deben proporcionar los Juegos Infantiles?
De igual modo, es indispensable acotar la estimulación de otros sentidos que pudieran quedarse sobreentendidos con lo dicho de los anteriores. Nos referimos a la propiocepción, que se entiende como la capacidad de percibir cada parte de nuestro cuerpo en todo momento y movimiento. Y son justamente los juegos que implican una nivelación en el equilibrio de los niños los que resultarán las mejores herramientas para lograrlo.
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¿Qué tipos de juegos se adaptan a los principios anteriores?
Resbaladilla y escaladores: Favorecen el control del cuerpo, por medio del equilibrio, al escalar y deslizarse, en el caso de resbaladillas y toboganes. Reconocimiento de texturas a partir de la sujeción de barandales, tubos, o los rocódromos, en el caso de los escaladores.
Columpios, volantines y sube y baja: Estos juegos también son excelentes para el manejo de equilibrio, la propiocepción, y la coordinación. Asimismo, como mencionamos en líneas anteriores, estos juegos permiten que los niños realicen una actividad física sin que si quiera lo noten. Así como, en el caso específico de los columpios, el mecerse les abre una valiosa posibilidad de tener un acto repetitivo que les ayude a mantenerse en calma.
Paneles y juegos musicales: Como lo mencionamos anteriormente, favorecen el desarrollo intelectual, social y emocional en todos los niños, pero especialmente juegan un papel fundamental para los niños con TEA, porque pueden ser provechosos como instrumento de relajación. Sin olvidar que el tacto está cien por ciento involucrado en todo momento.
Casitas: Son perfectas para desempeñar el papel de los espacios seguros o de refugio para niños con TEA. Tanto para Áreas Recreativas al aire libre como en espacios cerrados, las casitas siempre servirán para que los chicos, primordialmente los más pequeños, puedan alejarse de la estridencia de forma segura.
Paneles educativos: Al ser juegos interactivos, promueven la concentración de los chicos al tiempo que les invitan a echar a volar su imaginación a volar. Igualmente se trabaja satisfactoriamente la tan necesaria motricidad fina.
Cajas de arena: Sin importar la edad de los niños, las cajas de arena son estupendas como herramientas que estimulan el sentido del tacto. De modo que los niños reconocen y reaccionan ante nuevas sensaciones con su cuerpo. Sin olvidar que se practica la incipiente escritura con sus manos.
¿Qué estrategias se pueden implementar para que la estadía de los chicos en el parque sea de lo más placentera?
Se podría pensar que, para cumplir con los objetivos de estimular satisfactoriamente a los chicos con TEA, se tendría que realizar grandes modificaciones en los juegos existentes, pero nada más ajeno a la realidad que eso. En realidad, lo que tendría que ser incluido, por parte de los cuidadores, son una serie de estrategias para la comodidad de los chicos con TEA, como se sugiere a continuación:
Indiscutiblemente, los Juegos Infantiles son espacios y herramientas trascendentales en la vida de los niños con autismo. Por lo que se tienen que entender menos como objetos dedicados a chicos neurotípicos y más como una necesidad para que todos los niños puedan integrarse en una comunidad armónica.